Cuidados de la Planta Mirto o Myrtus Communis y sus Características

Myrtus Communis

Sea como un símbolo de pasión, fertilidad o incluso luto, mucho es el misticismo y valor ornamental que históricamente rodean a la planta Mirto. Como expertos en servicios de jardinería, se trata de un arbusto con el que nos encanta trabajar, ya que es precioso y muy aromático para el tipo de planta que es.

Y es que ignorando un poco las mágicas propiedades que alguna vez los griegos y romanos le confirieron, como planta de jardín es muy interesante y un ejemplar que debemos conocer a fondo, razón por la que hoy te contaremos que la hace tan única y que cuidados generales necesita para lucir todo su esplendor.

¿Cuáles son las características de la planta Mirto?

Es un pequeño árbol mediterráneo, o podría decirse que es generalmente un arbusto.

También es llamado Arrayán (apodo de origen árabe) en alusión a lo aromático de sus aceites, y su nombre técnico como bien dice el título es Myrtus Communis, en mención de la palabra perfume en griego (Myrtos) y común (Communis).

Es de la familia de las mirtáceas, y su origen es africano o bien de la Europa meridional.

Al ser perenne, mantiene su follaje durante todo el año, el cual se compone de hojas muy pequeñas de textura coriácea, con forma de punta de lanza, disposición opuesta y de una superficie reluciente y lustrosa que relumbra de color verde. Y en cuanto a su madera, es un tronco leñoso rojizo que se vuelve frondoso y lleno de bifurcaciones a medida que crece.

Es esa frondosidad y gracias a una gran tolerancia a cualquier tipo de poda, que es considerada un gran espécimen para hacer setos o podas topiarias, es decir, cortar de manera artística dando formas no naturales, sean esferas, espirales o cubos perfectos.

Las hermosas flores por las que es recordada como símbolo de pureza y amor, se van formando al culminar la primavera para lucir en verano (entre Julio y Agosto). Y podrían describirse como inflorescencias simples de 5 pétalos blancos perfumados, 2 cm de diámetro, y un centro donde convergen un montón de estambres que terminan en coloraciones amarillentas.

El aroma que desprende como arbusto se puede comparar con el del eucalipto o el limón. Y su altura la hace muy amigable para jardines pequeños al erigirse entre 3 y 5 metros.

Propiedades medicinales

La infusión de sus hojas puede utilizarse como un antiséptico, antiinflamatorio, antibiótico o antigripal, ya que sus resinas y aceites esenciales tienen características expectorantes y sedantes para el ser humano.

Cuando sus flores han sido polinizadas y han cumplido su ciclo (entre Octubre y Diciembre), el mirto produce unas bayas redondas y de color azul oscuro con una pequeña corona en la punta. Estás en particular son muy agrias y/o amargas, y son mejor disfrutadas por las aves o para la preparación de licores. Aunque hay subespecies cuyo fruto sí que es dulce para el consumo personal.

De manera alternativa, tanto sus bayas, ramas y hojas son utilizadas culinariamente como un aromatizante o resaltador de sabores, y su esencia es de gran utilidad en la industria cosmética.

Planta Mirto

Cuidados de la planta Mirto o Myrtus Communis

Los diferentes pasos y normas que debemos seguir para entender el cuidado de este pequeño árbol, podrían resumirse fácilmente en:

Obtención y Plantación en tierra firme

Sea por semilla, por esqueje o por acodo, el momento idóneo para plantar una de estas en un sustrato definitivo es durante comienzos de abril.

Y para plantar, debemos saber que es un arbusto bastante rústico, silvestre y que es capaz de adaptarse a todo tipo de sustratos. Pero si queremos mantener una salud general y mayor rendimiento, debemos disponer de un sustrato rico en materia vegetal como lo es la turba, una composición importante de arena y siendo lo más vital, un material que ventile la tierra como la perlita o la arcilla expandida (arlita).

Ya que el buen drenaje lo es todo para este arbusto. Y no soporta nada bien el exceso de humedad o el encharcamiento de su terreno.

Plantación en maceta

Siguiendo pautas muy parecidas a las del anterior punto, para tener un mirto en tiesto debemos procurar darle toda la tierra que necesita, y para eso una maceta con diámetro de 60 cm será nuestra base.

Lo que sí es verdad y es que al ser un árbol de tamaño medio, en estas condiciones su extensión debe controlarse con más podas de las que necesitaría normalmente en tierra. Como también, más riegos al estos secarse más por su condición de sustrato suspendido de la tierra.

Exposición al sol y riego

Al ser una planta mediterránea, es evidente remarcar que su naturaleza es heliófila y los climas fríos no le hacen ninguna gracia. En zonas cercanas a las costas como también las islas canarias, disfrutará de una plena exposición solar o también a una de semisombra. Mientras que en zonas más cercanas al centro o norte, requerirá de protección térmica sólo en aquellas épocas donde la temperatura baje a niveles críticos para ella, los cuales se encuentran en 0 °C hacia abajo.

Sin embargo y con el agua que necesita, el mirto aguanta muy bien las sequías y solo necesitara agua cuando podamos observar que las capas superficiales de su sustrato se encuentran realmente secas.

Abonado

Es necesario el uso de fertilizantes ricos en hidrógeno en aquellas etapas de crecimiento donde la planta se esté convirtiendo en un árbol, o por lo menos, satisfacerla en ese sentido cuando sea primavera o verano.

Esto claro está, con una frecuencia de 2 veces al mes. Y uno debe renovar su sustrato con materia orgánica y nueva tierra por lo menos 2 veces al año.

Es común que por el exceso de riego, la planta vea lavado mucho de su hierro y sufra de clorosis férrica, que es cuando su follaje se torna amarillento a pesar de tener su necesidad hídrica cubierta.

Poda

Toda poda que le hagamos a los mirtos debe limitarse al terminar el invierno, o mejor dicho, antes de que comience su estado de prefloración primaveral.

Si el mirto ha crecido demasiado y se ha puesto leñoso o grande, es decir, sus ramas han sobrepasado el tamaño deseado para un jardín pequeño, o están tan bifurcadas que no permiten un follaje vistoso, entonces debemos recurrir a la poda drástica. Una que debe llevarse a cabo con tijeras de poda del tipo bypass o yunque, o quizás hojas de serrucho sin son muy gruesas.

No sin antes saber que toda herramienta de corte debe estar desinfectada, y las heridas muy grandes producto de cortar ramas gruesas, requieren de la aplicación de cicatrizante. Esto para prevenir cualquier ataque fúngico.

Plagas

Puede ser perfectamente atacado por cochinillas (Cóccidos), pulgones (Áfidos) o mosca blanca (Aleyrodidae). Así como también hongos en sus raíces. Y todos estos son escenarios que se propician por el exceso de humedad.

Por suerte, sus mayores enemigos son plagas comunes que pueden resolverse con esencias como el aceite de Neem, o potentes insecticidas orgánicos como el preparado de jabón potásico. Pues tampoco estaría mal usar plaguicidas comerciales de amplio espectro, o tener a la mano antifúngicos en caso de que nuestro mirto reciba más humedad de la que pensamos.

¿alguna vez has visto alguno y sentido su aroma tan característico?

No te vayas sin dejarnos lo que piensas en la caja de comentarios.

1 Comment
  • Miriam
    Posted at 11:27h, 16 octubre Responder

    Extraordinario! Muy buena información, gracias!
    Miriam

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